En el marco de GetxoPhoto 2020.
False Positives explora las nuevas normas de comportamiento que se han desarrollado en el espacio público bajo la mirada de las máquinas y los sistemas de vigilancia automatizada. Esther Hovers colaboró con varios expertos en “vigilancia inteligente”, quienes le señalaron ocho actitudes consideradas como desviaciones del lenguaje corporal y del movimiento de los peatones. Correr repentinamente o quedarse inmóvil demasiado tiempo son comportamientos considerados anómalos, señales que los sistemas de vigilancia predictiva pueden interpretar como indicadoras de un posible crimen. Sistemas que, al contrario de la lógica temporal de la vigilancia tradicional, no documentan un suceso sino que tratan de identificar hipotéticos crímenes que están aún por suceder.
Las fotografías de Hovers, realizadas en el distrito financiero de Bruselas con la colaboración de desconocidos, escenifican las actitudes en el espacio público que los sistemas de control predictivo identifican como irregulares. El trabajo, que incluye dibujos de patrones de movimiento, cuestiona la mirada y el control que las máquinas entrenadas para la vigilancia ejercen sobre el comportamiento de las personas.
Nacida en Amsterdam en 1991, reside en La Haya, Holanda. Esther Hovers cuenta con formación como fotógrafa aunque en su práctica incorpora el dibujo, el texto y el cine de forma similar. Su investigación artística se centra en cómo el poder, la política y el control se ejercen a través de la planificación urbana y el uso del espacio público. Su obra se ha exhibido en el GEM, Museo de Arte Contemporáneo de La Haya, en el Festival de Fotografía de Lianzhou en China, en la Galería Nacional de Praga, en Aperture Foundation o en Foam Amsterdam, entre otros. Su trabajo ha sido publicado en The New York Times, The Washington Post, M – Le Magazine du Monde y Wired, entre otras y ha sido editado en forma de libro, False Positives, por FW:. . En 2018 realizó una residencia en el ISCP (International Studio and Curatorial Program) en Brooklyn y en 2019 en NARS Foundation, ambas en Nueva York, EEUU.