El Festival Internacional de Imagen-Getxophoto 2024 se celebrará del 6 al 30 de junio.
La próxima edición de Getxophoto Festival de Imagen se llevará a cabo del 6 al 30 de junio, teniendo como tema la idea de Play en una amplia acepción. Por segundo año consecutivo, la comisaria bilbaína María Ptqk dirige el programa artístico. De esta manera, 22 artistas procedentes de países como Suiza, Japón, Alemania, China, Argentina, Brasil, España, Estados Unidos, Polonia o Rusia mostrarán su obra en exposiciones e instalaciones (la mayoría al aire libre) en tres ejes principales de la ciudad: el centro de Algorta, el paseo de la playa de Ereaga y Romo–Las Arenas. Entre los lugares utilizados, cabe señalar el espacio del Mercado pues se convertirá en uno de los centros neurálgicos del Festival al acoger el Punto de Información, así como algunas exposiciones. El Casino Algorteño, lugar de encuentro y ocio de locales getxotarras, será intervenido por el artista y editor estadounidense Jason Fulford.
Las Galerías Punta Begoña serán otro de los puntos importantes del Festival pues, además de acoger dos exposiciones centrales, allí se desarrollarán varias actividades. Por segundo año consecutivo, una de las exposiciones se presentará en el ascensor de Ereaga, esta vez de la mano del artista internacionalmente reconocido Masahisa Fukase. Esta instalación podrá disfrutarse desde el interior del ascensor durante sus trayectos de ascenso y descenso.
Tras reivindicar en la anterior edición la ¡Pausa! como gesto de rebeldía y resistencia, este año abordan Play desde un lugar de reflexión pero también de acción, desde el que se cuestionan el jugar y el juego en su forma más ampliada, teniendo presente restricciones y limitaciones que se construyen en las sociedades en este sentido. La selección de proyectos realizada articula el programa artístico desde una mirada ecléctica hacia el lugar que ocupa el juego en nuestras vidas. Entre los 22 proyectos que se exhiben en el Festival destacan aquellos que abordan el juego en la edad adulta, recurso que a menudo usamos como escape, distención o abstracción de nuestra cotidianidad.
Getxophoto 2024: PLAY
Si el año pasado hicieron un llamamiento a la PAUSA, a detenernos y a bajar el ritmo, en esta edición de Getxophoto animan a todo lo contrario: a pulsar el botón de encendido. Este año, van a darle al PLAY.
¿Pero, qué significa esto? Además de ser la tecla más deseada de nuestros dispositivos, esa que se usa para reproducir imagen, música y todo tipo de audiovisuales, play remite en primer lugar a la idea de ponerse en marcha. Evoca estímulo y movimiento, impulso y vivacidad. Igual que se le da al play de canciones favoritas, se le da al play a nosotras mismas cuando arrancamos a hacer algo, cuando nos venimos arriba. Y es esta idea de activación –de pulsar el botón de la vida– la que mejor corresponde con el sentido original de la palabra. Porque play en inglés significa literalmente jugar, probablemente la ocupación humana más creativa que existe.
El juego es central a la historia de la humanidad. No obstante, durante mucho tiempo se ha considerado una actividad sin importancia, una suerte de patio trasero de la cultura; se le ha confinado al mundo de la infancia o identificado solo a través de los juguetes. Sin embargo, jugar es una actividad compleja que se muestra bajo distintas apariencias. El deporte y las competiciones son juegos. También las apuestas y los juegos de azar. Y por supuesto todas las formas de entretenimiento, desde los videojuegos hasta las artes de la escena pues, en muchos idiomas, jugar significa también interpretar un personaje o tocar un instrumento.
Por eso, ofrecer una definición única de juego es poco más que imposible. Algunos de ellos imponen muchas reglas mientras que otros dan paso al reino de la libertad total; unos son individuales y otros colectivos; algunos son pura diversión y otros tremendamente serios. Lo que está claro es que el juego es una práctica humana de primer orden, básica en el aprendizaje, presente en todos los ámbitos de la vida e inseparable de las artes. Cuando decimos play, por tanto, nos referimos a ese inmenso universo de activaciones y, en particular, a su impacto en el imaginario.